El contexto
Con decenas de millones de hectáreas de selva tropical en el sudeste de Asia perdidas debido al aceite de palma, caucho y otros productos básicos, ahora hay una demanda creciente de tierras en los países de la Cuenca del Congo. Por su parte, los gobiernos están recibiendo con los brazos abiertos proyectos de agricultura a gran escala, promoviéndolos como una forma de llevar desarrollo económico y empleos a una de las regiones más pobres del mundo.
Pero para las comunidades locales e indígenas, la realidad suele ser sorprendentemente diferente. Los proyectos han estado asociados con su desplazamiento forzado de tierras ancestrales, conflictos de tierras prolongados, pérdida de medios de vida con escasa o nula compensación, falta de respeto por su consentimiento libre, previo e informado (CLPI), así como contaminación del agua y el suelo.
Nuestra posición
Estos impactos son en gran medida consecuencia de la falta de respeto de los gobiernos de la Cuenca del Congo hacia los derechos consuetudinarios sobre la tierra, la ausencia de planificación del uso de la tierra y la falta de transparencia sobre los verdaderos costos y beneficios de tales proyectos. El desarrollo agrícola debe respetar en lugar de amenazar los derechos y medios de vida de los pueblos forestales, al mismo tiempo que protege el medio ambiente y beneficia los intereses nacionales. Creemos que esto implica mejorar la gobernanza de la tierra, reconocer los derechos de los pueblos forestales, lo que incluye atender sus necesidades y aspiraciones de desarrollo, adoptar políticas de protección del medio ambiente, mejorar la transparencia a lo largo del proceso y establecer obligaciones más específicas y rigurosas tanto para las empresas como para el estado.
LO QUE ESTAMOS HACIENDO
- Investigamos las amenazas que los proyectos de agroindustria representan para los bosques y las personas, y abogamos por su inclusión en las políticas forestales y los procesos de planificación del uso de la tierra.
- En el terreno, apoyamos a las comunidades afectadas para que mapeen sus reclamos de tierras y recursos, monitoreen las amenazas a sus bosques y exijan responsabilidades a los gobiernos y las empresas.
- Nuestro trabajo en los bosques comunitarios en la cuenca del Congo y el galardonado programa de medios de vida indígenas en Perú respaldan modelos alternativos de pequeños productores, mejorando las cadenas de valor y el acceso a los mercados, y demostrando cómo las economías forestales sostenibles son compatibles con la conservación basada en la comunidad.